Cuando Josep Campbell el más conocido estudioso de mitología de nuestro tiempo, creó la expresión "sigue tu don divino", plantó la semilla de una idea cuyo momento parece haber llegado. En "El Alquimista", aparece con el nombre de leyenda personal.Alan Cohen, un terapeuta que vive en Hawái, también trabaja en este asunto. Él cuenta que en sus conferencias pregunta quién esta insatesfecho con su trabajo; el 75% del público levanta la mano. Cohen estableció un sistema de doce pasos para ayudar a reencontrar el don de cada uno (siguendo a la escula de Campbell):
1. Digase la verdad a sí mismo.
En una hoja de papel, escriba a la izquierda todo lo que le encantaría hacer. A la derecha, escriba lo que hace sin entusiasmo. Escriba como si nadie fuese a leer esto; no se autocensure.
2. Empiece despacio, pero empiece.
Llame a la agencia de viajes, busque algo que encaje en su presupuesto; vea la película que siempre deja para el otro día; compre el libro que quería. Sea generoso consigo mismo y notará que esos pequeños pasos lo harán sentir más vivo.
3. Vaya parando despacio pero pare.
¿ Tiene que asistir realmente a esa reunión? ¿ tiene que ayudar a quien no quiere ser ayudado? ¿su jefe tiene el derecho de exigirle que, fuera del horario de trabajo, vaya a las mismas fiestas que la de él? Al dejar de hacer lo que no le interesa, verá que se estaba exigiéndose demasiado.
4. Descubra sus pequeños talentos.
¿Qué dicen sus amigos que usted sabe hacer bien? ¿qué hace con ganas, aunque el resultado no sea perfecto? Estos pequeños talentos son mensajes escondidos de sus grandes talentos ocultos.
5. Comience a escoger.
Si algo le proporciona placer, no lo dude. Si no lo tiene claro, cierre los ojos, imagine que tomó la decisión A, y visualice todas las consecuencias que conllevaría. Haga lo mismo con la decisión B. La decisión que le haga sentirse más conectado con la vida será la correcta.
6. No fundamente sus decisiones en posibles beneficios económicos.
Estos llegarán su usted realiza algo con entusiasmo. Un jarrón realizado por un ceramista que ama lo que hace o por un hombre que detesta su oficio, tiene alma. El primero se venderá rápidamente, el segundo se convirtirá en una mercadería sin salida.
7. Siga su intuición.
El trabajo más interesante es el que permite a uno ser creativo. Descartes, el padre de la lógica, desarrolló su método apartir de un sueño que tuvo.
8. No tema cambiar de idea.
Si usted abandonó determinado camino y este paso aún lo incomoda, revise sus decisiones. No luche contra lo que le resulta placentero.
9. Sepa descansar.
Un día por semana sin pensar en el trabajo. Permita que el subconsciente lo ayude y muchos problemas se solucionan sin ayuda de la razón.
10. Deje que las cosas muestren el camino más alegre.
Si usted lucha demasiado por algo y no obtiene resultados, sea más flexible y entréguese a los caminos que la vida le apunta. Eso no significa renunciar a la lucha.
11. Lea los símbolos.
Es un lenguaje individual vinculado a la intuición, que aparece en los momentos adecuados. Aunque estos le indiquen una dirección opuesta a la planteada, sígalos. En ocasiones se equivocará, pero solo así comprendará este nuevo lenguaje.
12. Por último: ¡Arriésguese !
Los hombres que cambiaron el mundo partieron de un acto de FE. Crea en las fuerzas de sus sueños, Dios es justo y jamás pondría en su corazón un deseo imposible de realizar.
Autor, Paulo Coelho
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